Golpe al Arte Salvadoreño: Destruyen Mural de Fernando Llort en Catedral de SS

Retiran mural de Fernando Llort en Catedral Metropolitana

El Arte y la Cultura Nacionales salen perdiendo. Ésta vez, no por parte de los vendedores de el Centro de San Salvador, sino que por parte de la misma Iglesia Católica, que decide, arbitrariamente, sin consulta alguna a entidades competentes, la destrucción total de el Mural hecho por el artista nacional Fernando Llort que adornaba la entrada de Catedral Metropolitana.

El Párroco de la iglesia, explicó que la remoción del Mosaico «fue consultado con la feligresía», por supuesto, sin explicar cuáles fueron los mecanismos de consulta ni los resultados. En lugar de el Mosaico, se pintará un Salvador del Mundo y habrá una estatua de Bronce que será donada por un artista y que no armoniza en lo absoluto con el trabajo realizado por Llort.

Mientras, la familia de Llort han denunciado a la Iglesia por destruir la obra sin consulta alguna hacia su padre o entidad que ayudara en su defecto a remover con cuidado el Mosaico que es considerado como su obra más importante según el propio autor. Personalmente debo decir que su obra no es de mi agrado, pero es un ultraje por parte de la Iglesia el destruir la obra de Llort sin consultarle ni avisarle. Al menos debieron remover los mosaicos con cuidado y entregados a una entidad competente o a la familia del Artista, pero por ahorrarse dinero, probablemente decidieron mejor destruirla y «hay que Dios se lo pague».

Terrible irrespeto hacia el Arte Nacional por parte de una entidad religiosa, que cree que el patrimonio nacional es de su propiedad sólo por estar montado en una Iglesia.  Si hay que destruir algo, es de demoler ese mastodonte espantoso que llamamos Catedral Metropolitana, que gracias a mentes CUADRADAS como las de ellos se desecharon diseños arquitectónicos hermosos y vanguardistas, en cambio, tenemos ese bloque horroroso de concreto con un huevo de pascua de sombrero. El Mosaico de Llort era parte de los esfuerzos que sirvieron para enmascarar un poco el espanto de Catedral que tenemos, Catedral considerada como una de las más feas (arquitectónicamente) en el mundo.