Lo que el FMLN no quiere escuchar sobre el crimen y la delincuencia

Hace dos o tres años fui asaltado en la entrada de mi casa, venía con mis hijos y mis “sobrinas”, hijas de un gran amigo, compadre y casi hermano  mío, por lo que sus niñas son como sobrinas mías.

El ladrón no parecía tal, sino un estudiante despistado que iba hablando por teléfono bajando por la calle en las que me estaba parqueando, pasó a nuestro lado y yo me dediqué a bajar a las niñas porque andaban cosas propias, mochilas y yo saqué mi maletín que contenía mi Laptop y se la di a una de ellas y estaba cerrando el auto cuando sentí el cañón de una pistola en la espalda.

– ¡Dame el pisto y el teléfono!

– Bueno… Tranquilo – Le dije y me saqué la cartera despacio, la abrí y le entregué todo el dinero que andaba, como unos 30 dólares, abriendo la cartera para que viera que no portaba más y deje la cartera sobre el auto por si la quería, se la daba también, saqué mi teléfono móvil despacio y se lo entregué sin voltear a verlo.

Una de las niñas se dio cuenta, pero afortunadamente todos habían entrado y ella muerta de miedo se metió a la casa.

El ladroncillo se dio por satisfecho y comenzó a caminar en la dirección que había llegado despacio y yo entré a mi casa justo cuando mi hijo salía indignado y cargado de adrenalina gritando y golpeando el portón, lo detuve en la puerta, porque no llevaba nada con qué defenderse de una pistola solo el garbo juvenil, pero el ladrón comenzó a correr tranquilo hacia la esquina y se fue. Seguramente había un auto esperándolo o algún compinche, porque del otro lado no había nadie.

Entramos a la casa, hablé a la telefónica para que desactivaran el número, el teléfono era de la empresa donde trabajaba y me lo descontaron pues el contrato no tenía seguro, pero al final no importa porque estoy aquí para contarlo.

Hace un par de días supe la noticia del asesinato de un joven ingeniero mecánico que resultó ser hijo del reconocido artista salvadoreño Aniceto Porsisoca, el crimen se debió a que en un asalto en un microbús o autobús se negó a entregar su teléfono celular.

El caso ha conmocionado la opinión pública por que el joven era catedrático de la universidad, campeón de ajedrez y todo un ejemplo a seguir, pero su valiosa vida fue arrebatada por un vulgar y miserable ladrón que impunemente anda asaltando en el transporte colectivo.

El señor presidente se queja de que los medios están creando zozobra, “exagerando el nivel de violencia”, pero parece que es ciego ante la realidad.

Hace años cuando recién Mauricio Funes tomaba el control del gobierno escribimos en el blog sobre la importancia capital que el tema de la delincuencia tenía para la gobernabilidad.

El tema de la delincuencia y criminalidad socavó la confianza del público en ARENA de una manera contundente, y a pesar del enorme voto de confianza que el nuevo gobierno tiene, este mismo problema hará que los índices de popularidad del nuevo gobierno desciendan rápidamente si no toma inmediatamente las medidas necesarias para comenzar a atacarlo. La delincuencia criminal, un problema prioritario – 2009

Sin embargo el FMLN nunca atacó el problema en toda su integralidad, sino que se dedicó a darle continuidad a las prácticas fallidas del gobierno antecesor, no ha cambiado las estructuras económicas que alimentan este problema, ni ha resuelto el grave déficit en educación.

Sencillamente el FMLN ha continuado con los mismos programas, las mimas deficiencias y las mismas mañas que tenían sus antecesores, únicamente cambió de manos la administración del error, esto se lo señalan por todos lados, incluso desde la militancia pero la cúpula hace oídos sordos.

Hoy viene el señor presidente a esconder la cabeza como avestruz y a decir que son los medios los que nos tienen en esta situación cuando la realidad salta a la vista y la vivimos en carne propia, las maras han desbordado a la policía, la delincuencia se ejerce impunemente sobre la ciudadanía y esta situación no solo es aprovechada por la oposición sino que incluso alimentada, sin que el gobierno sepa como reaccionar.

Desde que asumieron el gobierno el 2009, el tema era prioridad, pero no se la dieron y hoy sigue siéndolo pero tampoco reaccionan.

ARENA no hizo más que incrementar la delincuencia y la inseguridad pública, pero el FMLN no está haciendo NADA por revertirlo.

Cuando pierdan el gobierno habrán perdido la oportunidad de cambiar el país, pero a muchos de ellos ya no les importará pues han logrado “sus ahorritos”.

¿Y usted que opina?

4 comments for “Lo que el FMLN no quiere escuchar sobre el crimen y la delincuencia

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