Desde tiempos de la confrontación armada entre el ejercito guerrillero del fmln y el gubernamental de El Salvador (GOES), lanzo el Padre Ellacuría una cátedra que la llamo de Realidad Nacional.
En ella invitaba como ponentes a distintas personalidades del ámbito público-político a hacer un análisis que el denominaba ético-político, rescatando a los pensadores clásicos de la filosofía política.
Era un análisis de la situación conflictiva que vivía el país y la región Centroamericana.
Esto le valió muchos amigos y enemigos.
Todos y no solo ellos nos veíamos afectados por la situación de conflicto socio-político y militar.
Pero el P. Ellacuría mantenía la opinión que la filosofía tenia por objeto la realidad histórica y como función la liberación de estructuras de opresión.
Su objeto mismo era la realidad mas desnuda o nuda realidad que era la realidad de las mayorías empobrecidas del tercer y cuarto mundo, es decir esto era lo mas real de lo real (una verdadera metafísica).
Todo ello lo llevo a sufriera persecuciones y al final lo asesinaran, como a otros tantos que desde su perspectiva hacían una denuncia y un anuncio (del reino de Dios?) de las injusticias que se daban en la realidad.
El interpretaba que la filosofía no era una actividad meramente teorética o de ociosos sino tenia una dimensión práctica. Que en realidad era un esfuerzo como tantos otros por pensar críticamente por medio de la razón sentiente como le enseño su maestro X. Zubiri la realidad, aunque siempre se diga que los sueños de la razón producen monstruos, como lo apunto Goya.
En cierta medida vale la pena sopesar el esfuerzo racional de los filósofos, porque todos en alguna medida lo somos, así como somos políticos o animales sociales como les llamaba Aristóteles, por encontrar una salida a una situación como la nuestra Centroamericana de histórica injusticia, desigualdad, pobreza y falta de oportunidades, que el mismo P. Ellacuría denunciara, mostrándose partidario a una resolución estructural de estas y de una salida político-negociada al conflicto armado.
Que el no pudo ver.
Si bien es cierto que en nuestro país El Salvador y sobre todo en San Salvador se hace algún tipo de filosofía académica (solo dos universidades tienen la carrera, de la gran cantidad de universidades que hay en el país, pero esto se justifica porque en un país pobre esta no es rentable) y extra-académica.
Esta a estas alturas es muy poco crítica y mucho menos edificante, constructiva o sistemática. Contrario a lo que algunos piensan que venga otro Apuleyo que fomente el comercio, yo soy partidario de que venga otro Platón que nos saque de la oscuridad.
Todo ello para una mejor comprensión de nosotros mismos y de la realidad, de una realidad donde hace falta mucho de empoderamiento de muchos sectores sociales mas débiles y desprotegidos.
Donde los poderosos económica y políticamente siguen haciendo de las suyas impunemente.
Pocas son las instituciones que denuncian como la UCA, todo lo demás es lucha por el poder. Aunque la UCA hace mas filosofía académica en su programa por la radio de la universidad YSUCA de los sábados por la mañana "La hora de Sofía" y va perdiendo el perfil de cátedras abiertas a todo público como era la intención del P. Ellacuría con su cátedra de Realidad Nacional esto se justifica porque el país ha dejado de ser noticia.
Las academias y las fuerzas vivas de la nación deben hacer un esfuerzo por retomar creativamente el esfuerzo de la filosofía que si bien no cambia el mundo como lo creía Marx, si da una orientación necesaria para una vida mas justa, recta y ajustada. Por último un llamado a los medios de comunicación en nuestro mundo tan intercomunicado para que no alienen o enajenen que no es lo mismo a las masas sino que se unan a este esfuerzo liberador.