Hace varios post mencioné que Alfredo Cristiani con el manejo de la crisis interna de ARENA, había dado muestras de fallos garrafales en el liderazgo que se esperaba de él.
Durante muchos años los medios crearon el mito acerca de Alfredo Cristiani como artìfice de la Paz, se le bautizó como el presidente de la Paz por los medios de la derecha salvadoreña, aún cuando él personalmente se desligó de todo el proceso de negociación, al contrario de Napoléon Duarte quien inició directamente el diálogo con la guerrilla que no culminaría, sino hasta el 16 de enero de 1992. Sin embargo Crisitani al ser vocero de la derecha salvadoreña permitiò que las negociaciones avanzaran y se lograra un acuerdo de paz que aunque adolecía de muchas deficiencias, puso fin a un conflicto que llevaba mas de una década desangrando a nuestra nación. Desde entonces se creó la imagen de Cristiani como Artífice de la Paz, aunque en términos reales, su participación fué muy poca e incluso contraproducente en algunos momentos, debido a su actitud prepotente y absoluta. La imagen de Alfredo Cristiani en el seno de la derecha salvadoreña se mantuvo elevada, desde entonces, aún cuando dejó de ser presidente y se alejó de la política activa, su prestigio como líder no fué olvidado por la derecha.
Luego de la debacle electoral del 2009, cuando Tony Saca había llevado a su partido al borde del precipicio, apareció nuevamente la figura de Alfredo Cristiani como el hombre en quien todos los Areneros confiaban para rescatar al partido tricolor del pantano a dnode había sido llevado. Así anunció una verdadera batalla para obligar al gobierno de Mauricio Funes a plegarse al poder de la derecha, negandose al presupuesto, a las reformas a todo lo que fuera necesario, a condicionar esos votos por la permanencia de los areneros enquistados en el gobierno y quienes saldran de patitas en la calle en cuanto termine el 2009. Aparentemente don Alfredo las tenìa todas consigo. Pero internamente algunos de los areneros que eran ya de otra generación podían respetar al líder histórico, pero ya tenían otros intereses, diferentes lealtades y no veìan a Cristiani como su jefe real, por lo cual al día siguiente de la asamblea general en la que Cristiani proclamara su propio COENA y anunciara que un granítico y compacto Bloque Arenero iniciaba la campaña 2012 en plena unidad, un grupo de 12 diputaddos le dieron un campanazo que no ha podido resolver hasta el momento.
Alfredo Cristiani se mostró desconcertado, dudoso y de la prepotencia pasó al balbuceo y luego nuevamente a la prepotencia en una serie de tristes actuaciones que poco a poco les ha ido quitando la venda a los areneros sobre las verdaderas capacidades de su lìder y parece que las dudas que jjmar planteara en su post «Cristiani Presidente del COENA: Vino viejo en odres viejos» se hicieron realidad, Alfredo Cristiani no supo estar a la altura de las circunstancias y la crisis con que recibió su partido se ha agravado en sus manos, las bases detectan incapacidad de liderazgo y surgen voces de verdaderos líderes locales areneros como el Alcalde de Ahuachapan, Rafael Antonio Morán que manteniéndose dentro de la «institucionalidad» del partido, cuestionan duramente al actual liderazgo y les sugieren den paso a nuevas caras, piden que los Ex-presidentes no se involucren ya con el partido, piden que arena se convierta en un partido político.
El problema es que estos militantes, que son los que han mantenido en crecimiento las estructuras partidarias y que han ejercido auténtico liderazgo local en sus municipios, se dan cuenta de las fallas de los directores principales en el COENA, pero no entienden ni aceptan que en realidad ARENA es un partido diseñado para favorecer especìficamente a una argolla de poder que es la que actualmente se disputa el control del partido. El FMLN enfrentó problemas similares pero actuó rápidamente y con firmeza, sus líderes no titubearon y el partido salió cada vez mas fuerte de sus crisis, sin embargo en ARENA la historia es diferente ya que el grupo inicial rebelde ha tenido eco con otras voces que muestran su inconformidad con la actual cúpula y lanzan mensajes públicos de desacuerdo, cosa que antes jamás se hubiesen atrevido a realizar. Alfredo Cristiani está demostrando que en realidad no es el líder que tanto la prensa local como los Areneros pregonaban a los cuatro vientos, porque dentro de la militancia Arenera han aparecido verdaderos líderes políticos que ven con desagrado el manejo que la cúpula hace del partido.
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