El domingo 27 de octubre un numeroso grupo de funcionarios del más alto nivel del actual gobierno, todos pertenecientes al FMLN, dieron su respaldo público a la fórmula presidencial de ese partido político. El 23 de septiembre recién pasado el Presidente de la República a través del Decreto Ejecutivo 181, modificó las prohibiciones a los funcionarios de participar en política electoral, a partir de esa reforma los altos funcionarios podrían hacerlo en horas o días que no fueran laborables. Esto significa que tendremos un gobierno de 8 AM a 4 PM, de lunes a viernes. El resto del tiempo nuestros funcionarios se dedicarán a la campaña electoral.
Según fuentes dignas de crédito, lo sucedido este domingo es el primer paso de una serie de adhesiones que distintos funcionarios expresarán en las siguientes semanas. El siguiente acto serán altos funcionarios (Ministros, Viceministros y presidentes de autónomas), que no son afiliados al FMLN pero que están siendo convencidos de brindar apoyo. Paralelamente, los Ministros de Gobernación y de Obras Públicas reunieron hace varios días a todos los Gobernadores Políticos Departamentales para solicitarles que las estructuras de mesas ciudadanas que ellos conducen en cada departamento sean puestos a la orden de la fórmula presidencial del FMLN.
Con las mesas ciudadanas en los departamentos, el método será que invitarán a sus integrantes a participar en conversatorios con los candidatos presidenciales. Este método pretendía ser usado para “convencer” a la base de Cambio Democrático a espaldas de su dirección. Un último paso será con la masa de empleados públicos, que por diversos métodos que van desde las regalías hasta la presión buscaran disuadirles para que voten por la fórmula presidencial del FMLN.
Hace cinco años, cuando el FMLN estaba en campaña, tratando de ganar por primera vez el Órgano Ejecutivo, una de las críticas más agrias que hacían al gobierno arenero era que sus altos funcionarios estaban en campaña. También criticaban el uso de recursos públicos en beneficio del partido en el gobierno. Aunque hasta hoy no hay evidencias que esto esté sucediendo, se podría concluir que estamos a un paso para que esto pueda ocurrir.
Estamos obligados a preguntarnos ¿Cuál es entonces la verdadera diferencia entre el gobierno del FMLN y de ARENA si ambos terminan haciendo lo mismo? ¿Por qué el Presidente Funes cambió de opinión y modificó el decreto aludido? ¿Se le olvidó al Presidente que con ese pretexto exigió hace unos años la renuncia de funcionarios de Cambio Democrático?
Estas medidas del FMLN podrían ser demostraciones de desesperación por ganar en primera vuelta la presidencia, con lo cual se confirmaría la hipótesis que han planteado diversas encuestas de opinión en el sentido que en segunda vuelta, el FMLN perdería contra cualquier contrincante. Además el mensaje que envían es que con tal de ganar no importa lo que haya que hacer, incluso pasando por encima de los valores que por décadas se han proclamado.
Estas actitudes tienen costos, que hay que descontarlos de los aparentes beneficios. Muchos ciudadanos, especialmente en las zonas urbanas y en las clases medias, no verán de buen agrado estas maniobras electorales. No porque se trate de un partido de izquierda, si no por su naturaleza ética. El FMLN podría perder votos, que debe restar a los que gane con las medidas señaladas. Ojalá el balance no les resulte negativo y terminen perdiendo más de lo que ganan.
Ayutuxtepeque, lunes 28 de octubre de 2013.
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