El ex ministro Maza será convertido en víctima.

Pobrecito!

El ex Ministro Maza está pasando de ser un funcionario corrupto a ser una victima de un malentendido o de la mala fe. Después del escándalo de su captura, ahora leemos a conocidos editorialistas que han comenzado a salir en su defensa. Observamos un cambio en los contenidos de importantes medios de comunicación en el manejo de este caso.

 Llama la atención que en la defensa de la honorabilidad agraviada del Dr. Maza han aparecido comentarios editoriales de intelectuales que presumen de ser de izquierda, que ahora, al servicio del poder económico mueven su pluma en el sentido opuesto a sus ideales de décadas pasadas.

 El Ex Ministro es parte de uno de los grupos con más poder económico. Es miembro activo de la poderosa red farmacéutica y hospitalaria del país, que han hecho grandes fortunas convirtiendo la salud en un lujo inalcanzable. Este señor fue el instrumento a partir del cual se conectaban los intereses de este sector con los recursos estatales durante la administración pasada. Esta relación permitía, entre otras cosas, deshacerse de grandes contingentes de medicamentos a punto de vencerse que eran adquiridos por el Ministerio de Salud para ser enterrados clandestinamente unas semanas después. Esta práctica se denunció al principio de la actual administración, se mostraron a los medios los enterramientos de medicinas, pero hasta hoy la Fiscalía no avanza en las investigaciones.

 A los editorialistas de los grandes medios escritos ya se les olvidó el crédito internacional que se adquirió para construir el hospital de maternidad, del cual no existe ni el dinero ni el hospital.

 Situación similar a la del fulano que fue capturado con más de ochocientos mil dólares en efectivo en su apartamento, que ahora goza ya de libertad  y gracias al juez ha logrado “lavar” ese dinero, que ahora sí podrá colocarlo en la banca internacionalizada.

 Igual que el alcalde de San Francisco Menéndez en Ahuachapán, que a pesar de todo, nunca puso sus pies en una cárcel y ahora goza de libertad y de licencia para reelegirse en el cargo edilicio.

 Lo anterior solo a manera de ejemplos del grave problema de impunidad que vivimos en El Salvador. Estos casos demuestran que el problema de la justicia no es solo de recursos o de capacidad técnica investigativa. Es consecuencia de la incidencia de los grupos de poder y el crimen organizado en las instituciones encargadas de administrar la justicia. La impunidad es el resultado de un Estado que a lo largo de la historia ha sido patrimonio de los grupos que concentran el poder económico. Que lo volvieron débil e ineficiente para no ser controlados y ahora es también fácil presa del crimen organizado.

 Lo sucedido con el ex ministro es una demostración clara de la hipocresía de los que exigen mano dura contra los criminales pero se rasgan las vestiduras cuando la justicia alcanza a un delincuente de su clan. Nos demostró además hasta donde llegan las contradicciones de las derechas, que en este caso actuaron unidos.

 Tanto Saca como Cristiani tienen fuertes intereses económicos en la rama farmacéutica. En este punto no hay grandes diferencias. Ambos tienen como enemigo común a los actuales titulares del Ministerio de Salud que se han atrevido a presentar un anteproyecto de ley para regular el mercado de medicamentos y garantizar su calidad, su existencia y adecuada prescripción. Tanto Cristiani como Saca, saben que deben pelear juntos contra las políticas de salud del actual gobierno y contra medidas como las compras conjuntas de medicamentos que se harán a nivel centroamericano, para bajar costo y mejorar la calidad de los mismos.

 La diputada Milena Calderón se equivocó cuando en forma furibunda y perdiendo la compostura señaló en la última plenaria legislativa que el Dr. Maza no había sido Ministro de un gobierno de ARENA si no de GANA. En realidad parece que fue Ministro de ambos, pero sobre todo era el Ministro del sector farmacéutico hospitalario.

 Ayutuxtepeque, miércoles, 13 de abril de 2011.