De Scouts, Pioneros y «amenazas comunistas”

Cuando Sir Lord Robert Stephenson Smith Baden–Powell de Gilwell a principios del siglo pasado llevó a un grupo de muchachos a la isla de Browsea a realizar un campamento experimental de un modelo educativo que se le ocurrió mientras libraba una guerra imperialista del Reino Unido contra los también imperalistas germano-holandeses colonos de SudAfrica llamados Boers, nunca se imagino que su modelo educativo se convertiría en un paradigma universal de educación para jóvenes.

Durante la guerra contra los Boers, Baden Powell tuvo que defender la ciudad anglo-sudafricana de Mafeking, contra el asedio de los Boers que la sitiaron durante 217 días y a pesar de que se encontraban en grave inferioridad numérica y logística, lograron mantener y defender la ciudad, pero a base de astucia, engaños y la participación de jóvenes en tareas de vigilancia, espionaje y distracción,hasta que fué liberada por refuerzos ingleses. Este hecho convirtió al coronel ingles Baden Powell en un héroe nacional, pero además la efectiva y decidida participación de los jóvenes lo inspiró para fundar un movimiento juvenil que hoy se conoce como Boy Scouts, dicha gesta es recubierta con un halo heroico y exaltada en toda la literatura Scout que se puede encontrar.

Hoy en día la figura de Baden Powell es reconocida y respetada, a pesar de ciertos rumores sobre tendencias pedofílicas que le atribuyen, pero lo cierto es que el Sir Baden Powell fundó un movimiento con un método muy efectivo en la formación de valores y principios juveniles.

El movimiento Scout como se le conoce actualmente busca la formación integral de los niños y jóvenes basados en valores humanos, conocimientos prácticos de la naturaleza y en la adquisición de habilidades que educan en forma lúdica.

Aprovecha la natural disposición que tienen los jóvenes a formar grupos de afinidad o pandillas y la dirige hacia el servicio a los demas, la competencia sana regida por un códico de ética y de conducta cuya visión final es la de entregar un buen ciudadano a la sociedad.

El éxito de este movimiento ha sido tal que el método ha sido copiado por otras organizaciones religiosas o políticas fundando sus propias organizaciones, añadiendole los componentes propios de la ideología de quienes los dirigen, así es como aparecieron los “Exploradores del Rey”, “Conquistadores” y otros movimientos que copiando el método Scout le añadieron su parte ideológica, en este caso religiosa.

Los paises del bloque socialista fundaron los “Pioneros” que añaden la formación política a la de habilidades y valores.

El hecho es que los movimientos de este tipo son formadores, trabajan con los jóvenes desde la niñez y les inculcan principios y valores que los convierten en líderes potenciales y en buenos ciudadanos.

Evitan que los jóvenes caigan en las agrupaciones delictivas, que sean seducidos por las maras que también aprovechan la tendencia gregaria de los jóvenes, pero en estos momentos para inculcar antivalores, a pesar de que ellos también tienen arraigados buenos valores como la solidaridad, la lealtad y el compañerismo.

Así que me parece una total estupidez que ciertos individuos aparezcan rasgándose las vestiduras por el movimiento de jovenes Pioneros como lo publica el Diario de Hoy: Radicales de Izquierda adoctrinan a menores, es como si dijéramos “Radicales fundamentalistas religiosos adoctrinan a menores” tratándose de los “Exploradores del Rey”.

Podríamos decir “Radicales neo-nazis adoctrinan a menores” si la Juventud Arenera comenzara a trabajar con el método Scout.

En realidad deberían alegrarse de que estos jóvenes forman parte de un movimiento que los aleja de las maras y del crimen organizado, así como existen los Scouts, los Exploradores del Rey, Conquistadores y otros movimientos similares, los pioneros se suman a este esfuerzo por eliminar el ocio juvenil, por redirigir la natural tendencia gregaria de los jóvenes y niños hacia la formación de buenos ciudadanos.

Si les meten teoría política es igual a que les metan una religión específica, posiblemente sea un error, en cambio el movimiento Scout no hace distinciones entre religión o ideología y a pesar de lo que digan los dectractores, no involucra aspectos políticos o partidarios entre sus principios.

Personalmente veo con buenos ojos el crecimiento y proliferación de estos movimientos formadores de nuestra juventud y debería ser una prioridad del gobierno apoyarlos y hacerlos crecer, dotándolos de recursos para efectuar su labor educativa que es dirigida por cientos de voluntarios que no reciben pero ni cinco centavos por dedicar sus fines de semana en el desarrollo de las actividades.

No importa si son religiosos, políticos o verdaderos Scouts, el hecho es que estos jóvenes están en un lado diferente al de las estructuras criminales de las maras y eso debe ser estimulado no cobardemente atacado como lo hace el periodico de Don Editorialista.

¿Porque no funda y patrocina mejor un Grupo de Niños Nacionalistas en las zonas marginales?

Existen ejemplos de esto en la historia, imagino que todos recuerdan a las conocidas Juventudes Hitlerianas (de las que el actual Papa Benedicto fué miembro),  con el mismo método Scout pero inculcando los valores nacionalistas que tanto pregona en su periódico, talvez asi logra contrarrestar el “efecto nocivo” que él le ve a los Pioneros. El único inconveniente que Don Editorialista seguramente tendrá es que en nuestras zonas marginales no abundan los niños Arios, rubios de ojos azules, pero supongo que podrá pasar de eso.

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