Estaba preparándome un té como a las 11 y 15 minutos de la mañana cuando uno de los técnicos de informática que pasaba me dijo en tono algo alarmado:
– Se ha “caido” Twitter a nivel mundial.
– Ok. Gracias. Le respondí y seguí en lo mío sin darle mayor importancia.
Pero por todos lados habían grupitos de personas que comentaban el hecho, revisaban sus teléfonos o miraban sus monitores, mas curiosos que afligidos.
– ¡Juela! ¡Tengo una amiga que debe estar muriéndose! dijo una chica por ahí.
– ¡Tuitiemos el incidente! decían otros por allá.
Viéndolo en perspectiva mucha gente entre la que me incluyo nos mantenemos medianamente informados gracias al dichoso Twitter, las agencias de noticias monitorean ahi sus fuentes, los Tuitstars alimentan su ego a base de Retuits, las niñas se quejan de sus novios y sus novios se quejan de #laselecta, los blogueros divulgan sus post, los diputados le cuentan al pueblo sus logros y necesidades, las celebridades muestran su incultura, los Trolls despotrican a diestra y siniestra y el eco sistema subsiste.
Twitter viene a ser como el sistema nervioso central de internet, los contenidos se generan en los periódicos, blogs, revistas, gestores de medios (Youtube, FlickR, Picassa, etc.) pero se trasnsmiten y divulgan por la red gracias a Twitter.
Mucha gente pasa sus solitarias tertulias nocturnas tuitiando con sus seguidos y seguidores, la caída de twitter de hoy no fué una “sobrecarga” del sistema que presentaba la famosa ballena, sino una auténtica caída del sistema que no ha tenido informe oficial a casi tres horas de su caida mundial, el sitio que sirve de vocero oficial del microblog, http://status.twitter.com/ sigue presentando el aviso con el que oficializaron sus “problemas”
Las redes de microblogin y las redes sociales se han convertido en parte de nuestras vidas por lo que parece inaudito que estas cosas pasen pero lo cierto es que pueden pasar.
Para un tuiteradicto cabe la pregunta: