A pesar de ser informático y trabajar en el área, no soy lo que llaman un “loco tecnología” o Gadgetadicto, es decir no salgo corriendo por el nuevo dispositivo accesorio que se lanza al mercado, ni instalo inmediatamente la nueva actualización de un software o Sistema Operativo, o adquiero el nuevo aparatito tan pronto como se pone en los aparadores, como lo hacen muchos de mis amigos y colegas, que, como parte del modo de ser de un informático, buscan estar siempre actualizados de primera mano, con lo último en novedades tecnológicas.
Sin embargo me gusta estar al tanto de ciertas tendencias, moviéndome al compás de los “truenos tecnológicos” como les llamaba McLuhan, y he tenido suerte en ese sentido, recuerdo que en los años noventa, yo fui de los primeros programadores que adoptaron Windows 3.1 y luego 3.11 como plataforma de desarrollo en la entonces recién adquisición de Microsoft. Visual Fox Pro para Windows lo que me dio trabajo seguro durante varios años, además tuve un blog antes que muchos jóvenes que eran los llamados a explotar esta tecnología y así de esta manera también recuerdo que allá por el 2008, en el viejo blog, publiqué sobre la potencial oportunidad que significaría Android para los programadores.
Luego bajo esa misma perspectiva hace mas de un año, ahorre lo suficiente para comprarme una tabletita Android bastante buena, que a estas alturas ya se encuentra relativamente obsoleta, pero que me permitió integrar mis cuentas en las redes sociales, Dropbox, GDrive, correos y a la que incluso comencé a instalarle programitas de prueba tipo “Hola mundo”, hechos con Eclipse y los plugins correspondientes en un (hoy casi abandonado) intento de seguir mis propios consejos, respecto a la programación con Android, pero es que al dejar de lado el trabajo “Freelance”, el tiempo se convirtió en mi peor enemigo, porque solo me queda relativamente libre el fin de semana, tiempo que en mi caso lucho por mantenerlo estrictamente familiar.
La Tablet me encantaba y hacía con ella muchas cosas, casi todas relacionadas al ocio y lectura de libros, pero veía a mucha gente orgullosa con sus iPad, sin que estuviera en mis planes comprar una. Sinceramente pienso que es demasiado cara para lo que haré con ella y a menos que seriamente me dedicara a programar aplicaciones para el iPad o iPhone, no había razón para gastar tanto dinero si tenía mi humilde, fiel y eficiente tableta, pero recientemente por una de esas dichosas venturas del destino llegó a mis manos una iPad de última generación, a todo “Gatocolor”, en calidad de préstamo con fecha indefinida de retorno, prácticamente un regalo y luego de usarla un rato estoy listo para hacer las odiosas comparaciones entre Tablet con Android e iPad con IOS.
Precio:
Tablet Android: $260 gTablet Viewsonic mas envío y otros gastos $287 la compré yo.
iPad 3a. Gen.: Aprox. $670 (Precio Siman, aunque yo la tengo sin pagar nada)
Memoria, procesador, tarjetas etc.
No vale la pena ponerme a describir detalles técnicos de la tecnología de la pantalla, la velocidad del procesador, etc. voy a destacar el funcionamiento.
Pantalla Táctil: La iPad es extremadamente sensible a la posición y al toque, la tablet Android difícilmente alcanza a ponerse en guardia, en este aspecto iPad gana con nocaut técnico, posiblemente en los modelos mas caros de Android se vayan a los penaltis pero en la baja gama no.
Tarjeta de Red: Me refiero a velocidad de navegación o de conexión a red, ambas se conectan con la misma facilidad pero definitivamente la navegación WiFi con iPad es mas eficiente y rápida, aunque de la Tablet Android no puedo quejarme, se tarda un poquito mas pero yo noté la diferencia y la lentitud de mi tablet hasta que tuve la iPad para comparar.
Aplicaciones: En este aspecto yo siento poca diferencia, salvo que existen mas aplicaciones gratuitas para Android que para iPad, haciendo a un lado los sitios de aplicaciones crackeadas, pero en cuando a las aplicaciones en general, admito que la appStore tiene muchas aplicaciones muy interesantes y realmente profesionales, Pero Android también tiene lo suyo, al final admito una leve ventaja de los aplicativos para Apple sobre los de Android.
Integración con el entorno: En este punto y contrariando a los grandes gurús de sitios como Alt1040 que son incondicionales de iPad, la Tablet con el mas viejito Android 2.3 le gana al IOS 5, (porque parece que el nuevo IOS 6 [disponible desde hace casi dos días] ya trae mas integración entre aplicaciones, pero posiblemente como respuesta a las protestas) ya que a todos nos parecía ridículo que pudiéramos subir directamente una fotografía a Facebook desde cualquier dispositivo medianamente inteligente, incluso un telefonito relativamente sencillo y no lo pudiera hacer con un ipad; en la versión 6 del IOS que desde anteayer está disponible para descarga y actualización, la integración con Facebook es uno de los puntos que destacan como mejoras novedosas.
En mi Tablet Android puedo acceder a cualquier archivo, tocarlo y enviarlo a donde yo quiera, al correo, a otra aplicación, al Dropbox, al GoogleDrive o enviarla por correo, en la iPad eso me ha resultado imposible, para comenzar no tengo acceso a nada que se parezca a un drive, no puedo ver los archivos, ni los directorios y eso me parece realmente decepcionante.
Me da la sensación de que es el iPad quien tiene el control, en cambio en la humilde Tablet puedo entrar a los directorios, ver, abrir, enviar, consultar, copiar y borrar los archivos en forma individual, puedo ver la estructura raíz de la maquinita Linux y sentir que la Tablet me pertenece pues tengo control sobre ella y su contenido.
En el caso de la integración también tengo el ejemplo de la aplicación Kindle que en la Tablet es una sola aplicación que integra el gestor de libros, el software de lectura, el acceso a la tienda Amazon y la compra en línea, pero en la iPad debo tener al menos dos aplicaciones diferentes, parece que Apple solo se integra con sus propios aplicativos, los cuales funcionan muy bien hay que admitirlo.
Acceso al dispositivo: Ahí también la Tablet Android noquea en el primer asalto a la iPad, el hecho de poder usar una memoria USB permite mas control sobre lo que se tiene en la Tablet, se pueden cargar y descargar documentos, canciones, ficheros multimedia, etc. directamente en las aplicaciones o en un directorio para después integrarlos en una aplicación, se pueden conectar dispositivos de ingreso de datos como mouse y teclado incluso ambos dispositivos sin tener que comprar un carísimo teclado Apple que funciona mediante Bluetooth, así como poder ampliarle la memoria básica a mi Tablet con una simple tarjeta SD, cosa imposible en la iPad.
CONCLUSIÓN:
A mi juicio la iPad se ha diseñado para el usuario no informático, porque el sistema asume el control y lo protege todo, el usuario solo “utiliza” los recursos, que son muchos, pero no puede disponer de ellos ni manipularlos a voluntad, las tablets Android en cambio resultan más amigables con el informático, que requiere de ciertos conocimientos técnicos para desplazarse y manejarla a voluntad, cosa que el usuario no técnico está imposibilitado a realizar dado que no conoce, (y sinceramente ni necesita conocer) mas allá del uso de una aplicación.
Así que la valoración para decidirse por una o por la otra, sería el conocimiento técnico del usuario, si usted mi estimado lector es un informático y linuxero no hay lugar a duda de que será más feliz con una Tablet Android a bajo costo y excelentes prestaciones que con una carísima iPad que lo mantendrá amarrado a lo que ella disponga, pero si usted es un usuario sin grandes pretensiones técnicas en informática porque no son su campo de trabajo o estudio, ahorre para adquirir una iPad que lo hará enormemente feliz por su facilidad de uso, sus aplicaciones y prestaciones que son una verdadera delicia para cualquier usuario.
Por otro lado si usted piensa trabajar en una Tablet, ya sea ipad o Android, no le espera un proceso agradable ya que las aplicaciones ofimáticas no se comparan a un Microsoft Office o a un Libre Office, la pantalla es muy pequeña, el teclado en pantalla es de uso infame, nada eficiente y realmente no es cómodo trabajar seriamente en una tablet.
Una Tablet es perfecta para transportar, acceder y presentar información, tablas, hojas, presentaciones, documentos, para navegar en internet, para leer libros o documentos, para interactuar con las redes sociales, para consolidar nuestros discos virtuales, para oír música, ver videos, para jugar, es decir actividades mas cercanas al ocio que a la productividad, por lo que si usted trabaja mucho y activamente con archivos, imágenes o documentos que después presenta, mejor tenga una buena laptop o desktop para trabajar y una Tablet para la movilidad y presentación de dichos archivos, busque que su tablet tenga cables hdmi o algún tipo de adaptador a video tradicional para conectarla a proyectores.
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