La nueva campaña electoral de ARENA

El nuevo equipo de conducción de la campaña electoral de ARENA lleva más de un mes de trabajo. Designado desde arriba, por el grupo de poder económico más importante del país, ha trabajado prácticamente desde el primer día de su designación. Los cambios que la campaña arenera ha sufrido son perceptibles por la mayoría de salvadoreños, que en las redes sociales han apodado los spots de televisión como “El gritón de ARENA”. La propaganda ARENERA ha subido de volumen y de intensidad, los contenidos han cambiado, una nueva empresa de publicidad ha asumido su conducción y hay asesores internacionales dando oportunas opiniones.

Es bastante claro el objetivo de campaña en esta primera fase: sacar a ese partido del letargo, de la división y la desmoralización en que cayó después la derrota electoral del 2009 y de las posteriores divisiones, las más importantes de su historia. Al mismo tiempo mantener una línea de ataque hacia los otros candidatos, el concepto que la mejor defensa es el ataque, ha comenzado a ser usado.

Para los que no simpatizamos con el partido ARENA el spot televisivo de “el gritón” nos parece vulgar y grotesco, pero no está dirigido a nosotros. Este spot ha sido diseñado para motivar a los areneros, llamarlos a que renueven sus votos de fidelidad, a que se vuelvan a entusiasmar y regresen a las filas partidarias. Es el estilo típico de la sub cultura que ARENA impuso en su militancia, un tipo que grita al estilo de un sargento arengando la tropa para que recupere su moral y se aliste para las nuevas batallas. Es el estilo gritón del mayor, cuando decía: presente por la patria. Es el estilo con el que siempre han tratado a su base de simpatizantes.

¡Esclavos a mi!

Algunos dirigentes de izquierda señalan que parecen los gritos desesperados de quien llama a salvar el barco que se hunde, no estoy totalmente de acuerdo con este comentario. Más bien refleja el estilo autoritario y simplista, característico del discurso arenero de todos los tiempos.En esta primera fase, ha disminuido un poco la presencia del candidato presidencial, casi ha desaparecido el candidato a la vicepresidencia. No pueden hacerlos desaparecer del todo, pues darían un mensaje negativo, pero se ha dosificado su presencia para no crear resquemores en una base en la que hay muchos descontentos con ambas figuras. Se trata de unificar al partido en torno a las viejas consignas y las remembranzas, pues no pueden lograrlo en torno a la fórmula presidencial. Igual suerte han corrido otras figuras de la dirigencia arenera, que fueron considerados conflictivos y controversiales, han sido apartados lo más posible, cuidando que los resentimientos de estos no les vayan a causar nuevos problemas.

Por otra parte, están preparando cuidadosamente la estrategia de campaña sucia. Para ella usarán organizaciones fantasmas, pues consideran inconveniente que el partido aparezca calzando este tipo de actividad. La campaña sucia tiene dos filones de ataque, uno contra Tony Saca y otro contra el gobierno de Funes y el FMLN. Han comenzado ya las primeras pruebas en las redes sociales para medir impacto, luego la irán dosificando hasta volverla intensa. La han dividido en fases que irán evaluando una por una.

Cuando los estrategas de la campaña de ARENA consideren que tienen ya una consolidación interna básica del partido y han logrado elevar un poco la moral de su membrecía, comenzará una fase de mayor activismo en el territorio. El entusiasmo debe consolidarse con acciones de campo. La tropa necesita salir a combatir en las primeras escaramuzas. Si el entusiasmo logrado no pasa a la fase de acción, va desapareciendo, la soldadesca se vuelve a desinflar. En este momento reanudarán las concentraciones en los pueblos, vendrán los spot de las multitudes que a lo largo y ancho del país aclaman al partido y los candidatos. Se organizará una gira de Norman por todo el país, buscando grandes concentraciones de masas en lugares claves. Con esto se demostrará que una ARENA ya repuesta y fortalecida sale con nuevos bríos a ganar las elecciones.

Los contenidos programáticos no serán importantes en este momento. El equipo de plan de país que con bombo y platillo presentaron hace varias semanas continuará en el ostracismo, salvo raros momentos. Este no es el momento de la razón, ni del análisis serio de los problemas nacionales, ni de las propuestas de solución. Este es el momento de la emotividad, del sentimiento, de esas reacciones poco racionales que motivan y condicionan muchos actos de los humanos. Es así como piensan reunificar la base arenera, así lo han hecho en el pasado y consideran que les dará resultado.

Uno de los enemigos de este plan es el tiempo. Los que manejan el poder económico quieren resultados a corto plazo. Saben que estamos a menos de ocho meses de las elecciones presidenciales y la última oportunidad de cambio de fórmula podría ser las vacaciones agostinas. En esta lógica la última semana de julio será de encuestas y evaluaciones. Allí decidirán el futuro inmediato de ARENA. Ojalá que no sea el futuro de El Salvador, el que quede condenado.

Ayutuxtepeque, jueves, 20 de junio de 2013.