El partido ARENA ha sido desde sus inicios, el instrumento político de una argolla económica que aún detenta mucho poder en El Salvador, el ex presidente, Tony Saca fue en su momento “el salvador” de ARENA por la posibilidad de que un hombre de “la calaña” de Schafik Handal llegara al poder ejecutivo, un “auténtico comunista” ante los ojos de la derecha mas influyente del país, los cuales aterrados ante esa eventualidad, le entregaron todo el control de su instrumento político a un hombre que supo venderse muy bien en su momento.
Así, en una de las campañas mas sucias y mejor orquestadas de ARENA, en las que al pobre Schafik lo embadurnaron de todo lo que podía ser usado en su contra, lo cual resultaba relativamente sencillo, dadas las características personales del candidato rojo sumadas a su oscuro pasado como guerrillero, Tony Saca logró arrasar con una votación que se suponía casi empatada.
En ese tiempo, Tony Saca era el héroe de multitudes y tío simpático a mas no poder, su carisma y elocuencia convencía y poco a poco le fueron entregando mas y mas cuotas de poder, hasta que se hizo del control total de partido, de la bancada legislativa, de los fondos del partido, del gobierno y prácticamente de los medios de comunicación que mantuvieron una constante y permanente campaña de imagen que erosionó las arcas del estado en niveles record y engordó a la clase comunicadora, como nunca antes había sucedido. (Como extrañan los periodistas a Don Tony)
Bajo su gestión, al igual que bajo las otras gestiones areneras se dieron sonados casos de corrupción que terminaron en el olvido oficial y mediático, pero Tony Saca seguía siendo el niño bonito de la élite económica que controlaba al país, mientras fabricaba por lo bajo y diligentemente su propia argollita dorada gracias al modelo eminentemente presidencialista de nuestro gobierno que le confiere mucho poder y control al presidente de la república y al ver cercana la finalización de su período presidencial sin posibilidad de una reelección consecutiva, decidió nombrar un sucesor confiable y manejable para seguir controlando, cuidando y haciendo crecer su emergente argolla de poder.
Ahí comenzó la debacle para Tony Saca, porque la izquierda entendió que con un “pura sangre”, jamás alcanzaría el poder y dispuso jugársela con una persona que además de prestigio entre la izquierda, tenía carácter y reconocimiento público, así como la posibilidad de generar alianzas con sectores no tan radicalizados, representados en los “amigos de M.F.”, apostándole todo a Mauricio Funes, pero esta vez al partido ARENA con todo y su maquinaria mediática, no les funcionó “el petate del muerto”, ni el fantasma del comunismo o el papel de guerrillero asesino de niños y violador de mujeres que no se lo pudieron endosar a quien no estuvo de parte de ningún lado concreto durante el conflicto armado.
Eventualmente Mauricio Funes, sus amigos y el FMLN, derrotaron al ungido por Tony Saca, es decir al Ing. Rodrigo Ávila, en una gesta que resulta histórica, ya que contra todo pronóstico, en forma “democrática” y por elección popular avalada por el patrón del m.. digo.. del norte, un partido de izquierda llegaba al poder por primera vez en El Salvador y perdían el absoluto control del ejecutivo que habían detentado durante 20 años, con esto perdían la capacidad de financiamiento irrestricto de sus estructuras partidarias, la maquinita de hacer billetes en las licitaciones gubernamentales y mucho mas, que apenas estaban empezando a comprender, luego de encajar el terrible golpe, en ARENA, al poco tiempo, toda la responsabilidad de la derrota se la adjudicaron a Tony Saca como absoluto gestor, lo que terminó en su expulsión del partido y sumado a este problema, por otro lado al cambiar de manos el gobierno venían las lógicas investigaciones a la transparencia de su gestión que podían terminar en acusaciones formales de corrupción a su gabinete y a él mismo, con el aval del apuñalado partido ARENA que no iba a mover un dedo para defender al culpable de su triste situación.
Pero don Tony como buen “turco”, es astuto y se dice que buscó acercamientos con la izquierda y con Funes, ofreciendo algo que no se podía rechazar, la llave para los entrampamientos legislativos que ARENA anunciaba para el FMLN en la boca de su líder, don Freddy Cristiani que vociferaba cual aireado Agamenón:
– ¡Arderá Troya!
Y Troya ardió, pero en su propia casa, pues de la nada y sin previo aviso, un grupo de “disidentes” de ARENA, que casualmente eran diputados propietarios de la bancada tricolor y que por coincidencia habían sido impuestos por Tony Saca, se sublevaron por discrepancias por la forma de conducción partidaria y sus actos de desobediencia ante la cúpula ARENERA terminaron en el desmembramiento del partido ARENA, del cual nació como engendro, el partido GANA, que luego de una elección legislativa, no ha terminado de cuajar en el gusto de la gente pero mantiene cierta cuota de poder gracias a la militancia “profesional” (es decir pagada) de algunos de sus miembros.
Sin embargo, del lado del partido rojo, no todo era color de rosa pues Don Mauricio Funes y “sus amigos” tenían también su propia agenda y tomaron las riendas del gobierno con plena independencia del partido que los llevó al poder, cosa que molestó a muchos en el FMLN quienes como una mala telenovela han ido viviendo a tropezones aquello que la Bersuit cantaba mas o menos así:e “Un pacto para vivir, odiándonos de sol a sol, revolviendo mas en los restos… de un amor…”.
Se acerca nuevamente un evento electoral del que saldrá un nuevo presidente de la república y esta vez el FMLN se siente con la capacidad de mandar a un “Pura Sangre” a la competencia electoral, alguien de adentro, que sea parte de la visión de partido y que les garantice la continuidad en la depredación de la guayaba…er..digo en el cambio.
Y mandan al que muchos sienten como el peor candidato, a don Salvador Sánchez Cerén, pero con un vice que consideran de lujo, al Alcalde Tecleño, Oscar Ortiz, del que rumoran muy por lo bajo, llegará a ser el candidato principal del FMLN cuando el sr. Cerén abandone su campaña “por motivos de salud”.
Por su parte en ARENA, profundamente divididos, no las tienen todas consigo ni con su estelar candidato, el también alcalde capitalino, Norman Quijano, que entre dientes, no es de total agrado para mucha gente de la cúpula y que a estas alturas no le ha sido designado compañero de fórmula, ya que temen que se convierta en otro Tony Saca dadas las características ego maníacas, que ha mostrado como alcalde de una comuna, cuya gestión ha sido apoyada al 100% por el gran capital, sin que haya hecho nada mas que arreglos superficiales y ornamentales.
En este escenario vemos con sorpresa que a pesar del candidato, el FMLN mantiene prácticamente un empate técnico con ARENA aunque la popularidad de don Norman, sea mayor que la del candidato rojo.
¿Que pasaría si de pronto le ponen a don Oscar Ortiz como contrincante a don Norman? Y le añaden a la mancuerna a Gerson Martínez que es otro funcionario de muy buena evaluación pública, al que le han cuidado la imagen como funcionario honesto, cumplidor, eficiente y transparente.
Se rumora el regreso de don Tony con un partido diferente a GANA que como dijimos no termina de cuajar en el gusto de la gente, se dice por ahí, que los chambres cuentan el rumor de que se está gestando un nuevo movimiento político, fuertemente financiado por… ¿El hombre del maletín?… Que surgirá como reacción financiada por la ex partida secreta, espontánea de la sociedad civil ante el desencanto de la población, por la nefasta polarización ideológica de ARENA contra el FMLN, que una vez formados y consolidados, buscarán un «líder» (que hable bien de El Salvador), capaz de concertar y llevar al país por el rumbo correcto que perdieron derechistas y retorcieron izquierdistas.
Y ese líder honesto, trabajador, carismático, inteligente, guapo, conciliador, solidario y espiritual es….
¡Esto se pone cada vez mas bueno!
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