El rumbo de país

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Desde hace muchas décadas El Salvador se ha visto sumergido en una voragine de violencia y de polarización en la que no podemos sentirnos a gusto con la forma como las cosas marchan. Hay muchas cosas por hacer, una de las principales es saber como se puede salir de esta situación de subdesarrollo en un país dependiente.

El dolar que nos introdujeron los gobiernos de ARENA, este es el caso de Francisco Flores no lo hemos podido asimilar. Hay que apostarle a una mayor productividad en la que todos debemos estar comprometidos. El caso es que hay mucho desempleo y mucho subempleo con un sector informal muy basto.

No podemos lanzar a las calles a tanta gente con el promedio  del salario minimo con el que mal se vive, se necesita ajustar las tuercas de la pequeña y mediana empresa y de los pequeños agricultores pienso que el gobierno del FMLN esta haciendo lo que puede, pero se necesita un mayor compromiso de parte de los grandes empresarios.

Podría parecernos que la sociedad salvadoreña marcha hacia un puerto muy incierto. Hay que tomar en cuenta todos los factores que hacen que la violencia y la desigualdad mermen. Sobre todo se necesita mejorar en la seguridad pública,  en la educación y la salud a buen ritmo.

No es posible que sigamos en las mismas un gobierno de unidad nacional es necesario para sentar las bases de acuerdos positivos en materia de desarrollo. Por lo visto no aprendemos las lecciones de la historia.

En el país hay mucha gente pensante que quiere iluminar el camino es necesario que los escuchemos a todos, no bastan con las elecciones períodicas.

Es necesario tener mayores niveles de participación. Nuestro pais siempre ha sido un país con vocación agroexportadora, sobre todo con el café. Es necesario que retomemos las propuetas del gobierno actual y dejemos de pensar en las próximas elecciones.

Ahi no hay mas que cuotas de poder. Pero no es eso lo que va salvar al país, los actores de la producción, no que tiene mayor vigencia es un entendimiento entre las partes que luchan con intereses contradictorios. Es decir los trabajadores y los empresarios. No es necesario estar abriendo heridas del pasado y concentrarnos en el presente y en las posibilidades futuras de cambio. Esto lo resentimos todos en especial la clase media. 

Los pequeños proyectos productivos deben ser tomados en cuenta sobre todo con la cooperación internacional. pero aun ahi, no quedan las posibilidades. Las remesas han bajado, el dolar sufre una crisis de la que dificilmente se repondra.

Todo el capitalismo parece sufrir un grave crisis, que afecta a todo el planeta. El problema de los alimentos caros y de la falta de agua en algunas zonas, las redes viales deterioradas y la falta de obras de infraestructura social afectan sobre todo a las clases menos pudientes. Hoy mas que nunca es necesario que los salvadoreños nos sinceremos.

Ya se ven algunos ejemplos de trabajo conjunto entre la alcaldia de San Salvador y el ejecutivo. Somos un pais un pais con mucho empuje sobre todo entre la juventud por lo que hay que apostarle a la educación.

Otros problemas mas dificiles como el trafico de drogas, la delincuencia de las pandillas tiene que tener un plan de la cartera de seguridad pública y las demas fuerzas punitivas sobre todo de la Corte Suprema de Justicia.

Tambien ya es necesario un relevo en la clase política es necesario que por todos lados se vean caras nuevas, la clase política vive de prebendas a veces insostenibles.

En fin es necesario que retomemos todos los paradigmas de desarrollo que se crearon cuando habia una cierta tendencia al optimismo de los planes de nación, el pais todavía anda sin rumbo, eso es lo que necesitamos: acuerdos para posibilitar el desarrollo. Nada de hacer negocio con la política sino mas bien apostarle a la productividad.

Es necesario que no nos cerremos en esquemas de simple inercia de que las cosas van a seguir iguales, quizá no nos viene mal un poco de aprendizaje político de otras experiencias en el mundo que han sabido sacar a sus paises de situaciones catastroficas y han llegado a buen puerto.

Esto no es un giro a la izquierda o a la derecha es pensar que tenemos las potencialidades para que el país funcione bien. El enfoque que pretendo en esas lineas es el de un desarrollo global.

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